Durante la contingencia sanitaria por el brote del coronavirus, digamos, los últimos cuatro meses, las agencias de viajes tradicionales vivieron un cambio notable al pasar nuevamente a la visibilidad, cuando muchos viajeros se quedaron varados en otros países o con alguna otra problemática, y vivieron la importancia de contar con el factor humano para la solución de una diversidad de conflictos.
Ahora, el objetivo es capitalizar este resurgimiento para reposicionarlas nuevamente en el espectro de la actividad turística, donde por siempre han sido uno de los pilares fundamentales, pero debido a la vorágine de la tecnología que de reprente, hace algunos años, llegó e invadió, las agencias tradicionales empezaron a verse resagadas, las que no se capacitaron ni actualizaron.
Yo recuerdo hace unos veinte años que hubo un “boom” en el surgimiento de las agencias de viajes, dándose una saturación, cuando quienes deseaban emprender, crear un nuevo negocio, fueron liquidados o se pensionaron, una actividad muy redituable por las excelentes comisiones de las aerolíneas, principalmente, y con muy poca inversión inicial, fue montar una agencia de viajes.
Tiempo después, las líneas aéreas bajaron cosiderablemente las comisiones, lo que fue un duro golpe para las agencias, y posteriormente llegaron las Online Travel Agency (OTA’s), lo que también mermo su presencia en el panorama, pero pese a todo contra viento y marea continúan hasta la fecha.
Durante una entrevista a la Country Manager de KAYAK para México, Fernanda Rivera, le pedimos su opinión de las agencias de viajes tradicionales, a lo que respondió que “a diferencia de lo que sucedía, incluso hace menos de una década, gracias a la tecnología hoy en día los usuarios tienen el poder en sus manos; ya no necesitan forzosamente de intermediarios, como agencias de viajes o módulos de las aerolíneas para encontrar vacaciones y precios a la medida”.
Y precisó que “es por eso que cada día más los viajeros son quienes planean y deciden cada paso de su viaje. La tecnología no es el enemigo de las industrias turísticas tradicionales, de hecho, es un puente que acerca a millones de viajeros que están buscando a través de sus computadoras lo que las empresas de hospitalidad, transporte y entretenimiento ofrecen. Las agencias podrían integrarse a este nuevo esquema y capitalizar todo el conocimiento que tienen del mercado en el que operan y así crecer su negocio”.
Y tiene toda la razón la directiva del metabuscador que procesa más de 6 mil millones de búsquedas anuales a través de sus plataformas para obtener información de viajes (con lo que ayuda, de esta forma, a turistas alrededor del mundo a tomar la mejor decisión), ya que en la etapa de aislamiento social se incrementó el uso de las tecnologías, así como las compras por internet a través de dispositivos electrónicos.
Al respecto Freddy Domínguez, Vicepresidente para Latinoamérica y el Caribe de Expedia Group, durante un simposio virtual internacional, al presentar otra perspectiva del periodo innedito por el que transitamos a raíz del brote del coronavirus, se refirió al momento en el que la actividad se detuvo debido a la contingencia sanitaria, sugiriendo que es cuando las empresas del sector deben repensar en su estrategia digital.
“En esta etapa han crecido las ventas por plataformas digitales, quizás hasta el punto de duplicarse. Tan sólo en Estados Unidos el retail por internet que registraba 5% de las ventas globales, se incrementó a 30%”, aseveró.
En otra plática periodística con Juan Socas, Director de Alianzas Comerciales de PriceTravel hablamos de que pese a que se puede pensar que en todos los casos las plataformas digitales le están ganando el mercado y compiten con las agencias de viajes tradicionales, en algunos casos sucede lo contrario, las apoyan, se convierten en un aliado para failitar su operación y optimizar sus ingresos mediante una serie de herramientas, tal es el caso de TRAVELINN, uno de los brazos de PriceTravel.
Al respecto, Socas comentó que su trabajo año con año se enfoca en fortalecer cinco piezas que forman la propuesta de valor de TRAVELINN, centradas en: tecnología, producto, servicio, formas de pago, e ingresos.
Finalmente, podemos mencionar que nos percatamos de la importancia de la profesionalización, la capacitación y mantenerse a la vaguardia, que es el paso que deben seguir las agencias y, por supuesto, entrarle a las herramientas digitales, lo que deben sumar a su vasta experiencia que marcará la diferencia en el mercado.